El Salvador ofrece encarcelar a delincuentes deportados de EE. UU. a cambio de una tarifa
El Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha ofrecido aceptar a delincuentes convictos deportados por Estados Unidos a cambio de una tarifa, lo que ha sido elogiado por el Secretario de Estado, Marco Rubio como una propuesta «sin precedentes y extraordinaria». La oferta de Bukele incluye acoger a ciudadanos estadounidenses y residentes legales convictos, con el objetivo de hacer sostenible el sistema penitenciario salvadoreño. Esta propuesta abarca también a inmigrantes indocumentados de cualquier país, incluidos miembros de bandas como MS-13 y Tren de Aragua.
Durante una reunión con Bukele, Rubio informó al Presidente Donald Trump sobre la oferta y la describió como un acto de «extraordinaria amistad». Sin embargo, la deportación de ciudadanos estadounidenses sería ilegal, salvo en casos excepcionales. Bukele sugirió que los delincuentes deportados serían alojados en el Centro de Confinamiento del Terrorismo, una prisión construida para 40,000 personas. Grupos de derechos humanos han señalado problemas de hacinamiento y denuncias de tortura en las cárceles de El Salvador.
El acuerdo recuerda a un pacto similar firmado en 2019, conocido como «tercer país seguro», que no se implementó debido a la pandemia de COVID-19. La nueva propuesta de Bukele es vista como parte de los esfuerzos del gobierno de Trump para conseguir apoyo de los países de la región en temas como la inmigración ilegal, el tráfico de fentanilo y la restricción de la influencia china. Desde su llegada al poder en 2019, Bukele ha sido alabado por reducir la delincuencia en El Salvador, aunque sus medidas han suscitado críticas por violar derechos humanos y el Estado de derecho.
