El insomnio afecta a muchas personas y puede estar relacionado con bajos niveles de melatonina, la hormona que regula el ciclo de sueño y vigilia. Algunos alimentos pueden estimular su producción de forma natural, favoreciendo un descanso más profundo y reparador.

Esta fruta, cargada de antioxidantes, favorece la relajación y el bienestar, ayudando a conciliar el sueño de manera natural. Investigaciones señalan que el consumo de cerezas puede favorecer un descanso prolongado y continuo. Esta fruta contiene varios elementos que ayudan a mejorar la calidad del sueño, posee antioxidantes que contribuyen a reducir la inflamación y facilitar el descanso, aporta vitamina A, vitamina C y magnesio, disminuye la cantidad de veces que una persona se despierta durante la noche.

Para aprovechar sus propiedades, se pueden incluir en la alimentación de diversas maneras, ingerir cerezas frescas entre una y dos horas antes de acostarse, tomar un vaso de jugo de cereza ácida o guinda dos veces al día, por la mañana y en la noche, comer cerezas secas como merienda antes de dormir. Incorporarlas en la cena, ya sea en una ensalada de frutas, mezcladas con yogur natural o en un postre sin azúcares añadidos.

Se recomienda incorporar esta fruta de manera gradual y, si se observan efectos positivos, aumentar la cantidad de manera progresiva. Otras frutas que pueden favorecer el descanso incluyen las bananas, el kiwi, el maracuyá y las frutillas.

Con información de: El País

¿Qué opinas de esto?