Las varices son venas inflamada que se encuentran justo debajo de la piel, Las varices surgen debido al daño de las venas o a la debilidad de estas. En cuanto a los motivos, pueden ser diversos, como la edad, el embarazo, sobrepeso u obesidad, o por permanecer sentado largos periodos de tiempo o tener un estilo de vida sedentario.

El aceite de ciprés: un remedio ideal para las varices

Según diversos profesionales, el aceite de ciprés es especialmente útil para esta patología debido a sus propiedades, que alivian la hinchazón y mejoran la circulación.

Para preparar una solución que pueda mejorar esta condición, los expertos recomiendan mezclar cinco gotas de este aceite esencial con una cucharada de aceite portador. En un recipiente limpio se debe mezclar hasta conseguir la solución. Una vez esté preparada, se debe aplicar dando un suave masaje ascendente, desde los pies hasta los muslos. De esta manera se sigue la dirección natural de la circulación, favoreciendo el retorno venoso.

Este aceite puede ser un gran aliado no solo para las varices, también para aliviar la sensación de piernas cansadas y cargadas. Además, tiene una acción tonificante y revitalizante que ayuda a aliviar la hinchazón y prevenir problemas circulatorios como las propias varices, los calambres o los edemas.

Otras recomendaciones para prevenir las varices

Aunque, el aceite de ciprés o el de lavanda, pueden ser buenos métodos para mejorar el problema de varices; también existen tratamientos que pueden ayudar a prevenirlas.

Una de las principales es el ejercicio físico. Realizar caminatas con regularidad, nadar y otros ejercicios que hagan que muevas las piernas, son esenciales para mejorar la circulación. Además, es importante elevar las piernas cuando echamos una siesta o en los momentos previos o posteriores a realizar ejercicio, para favorecer la circulación de esta zona.

Por otro lado, según los expertos de Mayo Clinic, el uso de medias de compresión puede ayudar a reducir la hinchazón y el dolor de piernas; aunque es importante que el uso de estas sea recomendado por un especialista. Es fundamental tener en cuenta que no debes estar mucho tiempo de pie y, si en tu empleo debes hacerlo, procura tomar descansos, andar y mover las piernas.

En la alimentación, también reside una de las claves. Y esta es, precisamente, en relación a la sal. Esta puede aumentar la retención de líquidos. Una dieta baja en sal puede ayudar a que se reduzca la hinchazón. Por su parte, el café o el tabaco, son agentes que pueden ayudar a empeorar las varices por lo que, restringirlos o evitarlos podría ser óptimo si tienes factores de riesgo.

Con información de: Marca

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